sábado, 20 de octubre de 2012

¿Se suavizará Google después de su caída en la bolsa?


Lo malo de ser empresa pública es que tienes los mismos problemas que las demás en la bolsa: la loquera de los traders.

Google se ha considerado, con razón, una de las compañías más exitosas de la historia (podría decir que “la más”, pero como informático, no sería muy objetivo), pero como cualquier otra, es proclive a unos pequeños descalabros de algunos milloncitos. Perdón, militos de milloncitos.

La caída del 9% de Google muestra lo que puede pasar con una empresa pública cuando alguien comete un pequeño desliz, como sacar los resultados antes de tiempo.

¿Qué efecto podría tener esto? Pues considerando que perdieron un buen de lana y que todo mundo estará un poco molesto, tal vez Google le perdone un poco las cosas a las muchas cuentas de Adwords que desaparecieron en los últimos años.

Por un lado hubo muchas teorías de conspiración donde le echaban la culpa a Google de querer desaparecer a los pequeños emprendedores al negarles el acceso a Adwords, su popular plataforma de anuncios, favoreciendo a los grandes anunciantes.

Sin embargo, hay que considerar que muchos de los hits que dio Google fueron para quitar cuentas espamosas o que llevaban a páginas que estaban fuera de los términos de servicio. Hasta yo recibí un par de advertencias por anuncios a mi sitio, aunque supongo que era el tema.

Lidiar con millones de cuentas y usuarios donde muchos son spam o hechas para hacer tranzas es bastante complicado y no puedes esperar que salga bien todo a la primera.

En fin, ¿esto querrá decir que, para conseguir algo de lana, se tienten un poco el corazón a la hora de repartir penalizaciones?

Todas las empresas tienen un objetivo: hacer lana. Esto se puede escuchar medio frío, pero es la realidad. Si no hace dinero, la empresa no puede mantener empleos, no puede pagar impuestos ni crecer.

Un empresa sin lana no puede cubrir sus obligaciones y termina quebrando, causando problemas en la sociedad a la que supuestamente debería de servir (por una lana, claro).

Y conste que no pienso que esto sea malo: simplemente es la manera en que funciona el mundo.

¿Se suavizará Google después de esto? ¿Y qué habrá pasado con el cuate al que “se le salió” el estado de resultados antes de cuenta? ¡BRRRRRRR!, hasta frío me dio…




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